Obra imponente que representa al León de Judá, símbolo de fuerza, autoridad y realeza. La pieza combina un vibrante fondo rojo con trazos expresivos en blanco y negro, enmarcada en un elegante marco dorado que resalta su presencia majestuosa. Ideal para espacios modernos y minimalistas, esta obra invita a la reflexión y transmite poder y solemnidad.
Obra imponente que representa al León de Judá, símbolo de fuerza, autoridad y realeza. La pieza combina un vibrante fondo rojo con trazos expresivos en blanco y negro, enmarcada en un elegante marco dorado que resalta su presencia majestuosa. Ideal para espacios modernos y minimalistas, esta obra invita a la reflexión y transmite poder y solemnidad.